Por un 2019 que nos siga encontrando juntos!
Es común que hacia el final de cada año nos tomemos unos días para hacer balances, reflexionar, agradecer y prepararnos para el ciclo próximo. Pero este no ha sido un año como cualquier otro, la obra ha cumplido 30 años y con ella nuestros sueños, nuestros anhelos, nuestra comunidad toda se ha visto bendecida y la celebración ha sido por demás significativa. Por eso, llegan estos momentos, los de agradecer, y pareciera que los motivos nos desbordan porque ha sido todo digno de la gracia y la sabiduría de Dios.
Ante todo, entonces, agradecemos a él: a Dios y al Divino Niño por su misericordia y los buenos momentos compartidos. A todos quienes nos acompañaron, de diferentes maneras en nuestros 30 años, a veces no con la presencia física, pero sí con el saludo, el pensamiento, el rezo a la distancia y la palabra sincera. No queremos dejar de nombrar a quienes nos acompañan y sostienen en la tarea de todos los días: Obispado Diosesis Villa de la Concepción del Río Cuarto, Municipalidad de Río Cuarto (Área Educación, Área Discapacidad, Gobierno Abierto, Secretaría de Deportes, Secretaría de Salud, Seguridad Alimentaria.), Gobierno de la Provincia de Córdoba, Universidad Nacional de Río Cuarto, en especial a quienes coordinan el Consejo Social y los docentes y estudiantes de las prácticas socio comunitarias, Sociedad Rural Río Cuarto, Bio4, Tarjeta Naranja, Tate, CEPI, Instituto Balcarce, L`etoile, Marijo, Fundación 2030, Asociación Gremial de los Empleados de Comercio, Unión del Personal Civil (PECIFA), a las familias, amigos, colaboradores que acompañan desde el silencio y el anonimato, a los padrinos y madrinas que abrazan nuestra obra y en particular a todas las personas que trabajan cotidiana y sostenidamente haciendo posible el cumplimiento de la misión de atender a los niños y adolescentes de la Ciudad de los Niños.
Esta última semana, concretamente el Domingo 23, nos encontramos celebrando el pesebre viviente que no es más que la representación de los hechos relatados en torno al nacimiento de Jesús. El sí de María, la confianza de José en Dios, el seno de una familia que recibe y abraza al Hijo, las puertas cerradas, el corral abierto, el aliento de los animales, los pastores, los Ángeles que alaba a Dios, la noche serena, la estrella en el cielo, los reyes de Oriente...todo eso configuró una escena que invitó a la contemplación y al gozo. Gracias al Padre Osvaldo y el seminarista Santiago por guiar a nuestros niños y niñas para esa celebración.
Con el correr de los días, el verano se hizo más presente y, al tiempo que terminaron las actividades escolares, comenzaron las de la colonia de verano. Como cada año, agradecemos a José Luis Oberto y la profe Susana por recibir a nuestros niños y jóvenes en la Colonia del gremio de los Empleados de Comercio.
Y mientras tanto, nuestros Scouts partieron de Campamento al Cerro El Morro (San Luis), están disfrutando mucho de sus aventuras y regresan el 31 al mediodía para esperar juntos el 2019.
Por todo esto, nuevamente, gracias! Nuestra comunidad sigue creciendo día a día, avivada por el amor de todos quienes trabajan por un futuro mejor para los niños. Por un 2019 que nos siga encontrando juntos! Bendiciones!
